Acuosas ganancias hay en tu pepa benévola
que lima los dientes del centro de tu paupérrimamente escasa
progresión personal
ojalá y sepas que estás tan mal
y que todo todo en ti fracasa
como contagiar a un cuchillo con el virus del ébola
Se te descuelgan los orgasmos en untados papeles de plata
y al final de mi corbata siempre estás subida a mi despilfarro
e inclusive
la música que te arrastra, sondea, corona y fagocita
es una simple papita en un copetín bizarro
donde cada cosa que narro te hace empapar la conchita
mientras la idea que te fagocita te hace abrir cada agujero
que yo desgarro
si quiero
¡Huye! ¡Corre mientras tengas potestad! ¿No captas que tanta verdad
está sentada en mi falda?
¿O acaso no sientes tu espalda anestesiada de pasión
mientras mi dulce aguijón que tiene gusto a condón
chupa lo que queda de tu vida? Una almibarada comida
que se está pudriendo en mi cama
mientras nada del mundo te llama y vas catando el veneno
te voy haciendo ese culo y te amasijo un seno
cuando no quedan hojas en ninguna rama
y yo jamás nunca ni siquiera tampoco
me lleno
y no me quema
ninguna flama
